“Nuestro lenguaje forma nuestras vidas y hechiza nuestros pensamientos.”  Albert Einstein

Por si no lo sabes, tus palabras tienen más poder que cualquier cosa viva.  Las palabras son el reflejo de lo que pensamos y tienen el poder de construir o destruir.  

En su esencia, las religiones y la mayoría de los caminos espirituales y de manifestación aseveran que, mediante la palabra, todo lo visible es creado.

Nuestras palabras generan emociones y las emociones generan cambios químicos en nuestro cuerpo, y pueden convertirse en estimulantes o en depresivos, teniendo consecuencias positivas o negativas en nuestra vida y en la de los demás.

Mas allá de las pruebas neurolingüísticas que confirman que la palabra hablada o escrita afecta los mecanismos de nuestro cerebro, en el ámbito científico ya hay quienes aseveran que el ADN, el cual es el archivo de información responsable de la construcción de nuestro cuerpo, podría ser reprogramado mediante el uso correcto del lenguaje.

Míralo de esta manera, tus palabras son como un virus cibernético que al entrar a tu computador llamado cerebro, afecta su sistema operativo. Cada palabra dicha, oída o leída, se filtra hacia tu subconsciente y aunque no te des cuenta, estas van creando una especie de programación.

Un lenguaje pesimista y hostil, es una programación de estancamiento o de retroceso, mientras que un lenguaje positivo, es de avance y de éxito. Esto ya ha sido probado, constatado y evidenciado por profesionales en los deportes, atletas olímpicos y personas exitosas en diversas áreas y negocios.

Tus palabras son como un bumerán: lo que dices, recibes y por lo tanto, afectan tus circunstancias, tu desempeño y tu vida en general.

Por tal razón, es mega importante que te hagas consciente de cómo hablas y te expresas y que utilices palabras positivas a fin de implantar una nueva programación que te ayude a la realización de tus logros y metas.

Comienza hoy mismo a utilizar palabras más alegres y positivas. Una vez instalada tu nueva programación, te verás actuando en “automático” de manera positiva,  MASIVA Y RADICAL, trayendo bienestar a tu vida.